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sábado, 2 de agosto de 2008

noche surrealista, barcelona realista

es una noche muy calurosa de pleno verano y me encuentro delante de la puerta de un hotel de la capital condal ya que me han hecho el favor de llevarme hasta aqui. sí, porqué tengo el coche en el taller y cada uno se espabila como puede, y me digo afortunado. ahora toca coger un taxi para poder estar lo antes posible en mi casa. el calor apreta y duele hasta respirar. me doy cuenta de que justo al lado hay un peepshow con la entrada claramente abierta, a la que no veo nadie ni medianamente acercarse no obstante la hora, muy llamativa por cierto, con sus luces de neon azulrojas que, quien sabe porqué, me recuerdan a mi ultimo viaje a Shangay. de repente oigo un derrape y justo delante mio un taxi pega el frenazo del siglo. me quedo un poco atónito y parado pero "buenas noches", "buenas noches" y me meto para dentro ya que estoy ansiando estar en mi casa para quitarme el uniforme después de un dia laboral de más de 15 horas y estar merecidamente en bolas. finalmente encuentro un poco de sosiego y frescor en el coche, pero no porquè el conductor tuviera puesto el aire acondicionado, sino porqué tenia las cuatro ventanillas totalmente bajadas y entraba una brisa huracanada: el so jodío iba a toda pastilla. menos mal - me digo - que me he puesto por la mañana unos diez gramos de cera en el pelo que sino me despeino. además el recorrido no duraria más de diez minutos. "bah, quien quieres que te vea a estas horas!!!" pienso, y ahí que pasa un autobus repleto de gente, todos enlatados como sardinas: supongo iban todos a una fiesta en una discoteca al aire libre ya que antes de llegar al hotel me habia percatado de tal acontecimiento no muy lejos de allí. por un momento me posee la envidia de poder disfrutar de una noche de verano pero el cansancio que me noto en el cuerpo me hace anhelar una ducha y mi cama. después de un par de minutos de silencio en que iba contemplando como zumbaban los edificios, el taxista me despierta de mis pensamientos: "...es que cuando le habia visto ahí en uniforme de iberia me he precipitado como un relampago, porqué no es bueno haceros esperar!". estaba a punto de decirle que de iberia nada de nada, pero paso y sigue: "si quieres conozco a un sitio donde se puede pegar un buen polvo, mira!, mira!, mira aqui que tengo la tarjeta de visita...sí, cuesta unos 140 euros pero las tias estan por lo que tienen que estar, te las follas y punto!!" ... silencio, y lo que quiero ahora es verme teletransportado en mi piso. "está de camino, puedo parar ahi, tardas lo que te haga falta, y yo te espero....": de repente el respetuoso Ud. se volvió en baboso tuteo. "...sino conozco otro rincón donde es un poco más barato, vale unos 100 euros, sí, porqué, macho, hay otro donde te hacen pagar la entrada, y eso no puede ser". Dr Spok donde coño estas? - pienso yo echando los ojos en blanco! pero de repente decido seguirle el rollo. desde luego no pensaba tirarme del coche en marcha y despuès de todo los taxistas siempre me han suscitado algo de pena ya que andan deambulando de aqui para allá como miríadas de Carontes cruzando la laguna Estigias. "y eso? como es que hay que pagar la entrada?" sigo yo intentando entablar una conversación. "es que hay muchos tios que solo entran para tocar culos y así los dueños de estos locales no ganan mucha pasta, de esta forma se aseguran que se vayan quedando un buen rato tomando más de un par de copas, ya sabes...eso no puede ser...lo que hay que hacer es tirarse las putas que pa eso estan allí y por eso se llaman así tambien!" y el gachó se hunde en su asiento soltando una sonora carcajada. menos mal que llegamos al penultimo semaforo y como no está en rojo. al lado se para otro taxi conducido por una mujer. arrancamos y suelta: "mmmm has visto esa rubita?!....está buena eh?!y seguro que es una de la que le huele hasta bien...." me entristezco en un breve silencio y si antes no lo habia captado ahora me resulta claro que el bestia estaba en pleno calor animal. por fin llegamos y me despido del menda haciendole entrega de mi obolo. ahora respiro un aire liberador y me dispongo a recorrer los ultimos cien metros que me separan de mi propio portal. Ahí unos adolescentes, chicos y chicas, que acaban de salir de un garito donde de vez en cuando pinchan una musica cautivadora pero al que nunca me he acercado y pienso al figura que acabo de dejar, un sujeto de unos cincuenta años regordete y sudorosamente calvo que, por lo que he podido percibir, no está casado, ni tiene pareja y vive todavia con su madre plenamente amargado. me cruzo con los chavales y estos rompen en un fragoroso y caluroso aplauso. les miro y les regalo una sonrisa de oreja a oreja, dudando si esta peculiar ovación era una felicitación a lo que acababa de librarme o al glamour que todavia desprendía mi traje. al fin en casa: me despojo del disfraz, me enciendo un cigarrillo y cojo de la neverra una cerveza. llamo a my special clon y le pego un par de mordiscos virtuales, como saboreando mi particular y dulce galletita, y la mar de contento me tumbo rendido en la cama. mañana serà otro día

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