En “Los hijos de la Malinche”, Octavio Paz reflexiona sobre la mexicanidad describiendo, de una forma subjetiva, la ambigüedad que caracteriza la identidad y la personalidad de los mexicanos. Paz profundiza sobre esta característica penetrando tanto en la esfera social, como en la esfera política, histórica, lingüística y religiosa del país y desarrolla su interpretación del carácter de sus compatriotas de una forma deductiva. El análisis de la palabra “chingada”, la referencia a varios poetas y novelistas y la propia historia mexicana son unos de los argumentos que el escritor utiliza para reafirmarse en sus convicciones.
Octavio Paz considera al mexicano una persona extraña y enigmática. Según él, esto se debe a la atracción y a la repulsión que México suscita dada su situación histórica y geográfica de marginalidad. El ensayista refuerza su visión con la mención de los rasgos que el campesino, la mujer y el obrero, analizados desde un punto de vista social, comparten con el mexicano. De aquí, pasa a afirmar que esta característica no permite a sus conterráneos revelar su propia naturaleza y reconoce que estos no solo no se dejan ver frente a los que no viven la realidad de su país, sino también ante sus iguales. Según el autor, las causas de esta conducta se encuentran en la propia historia de México. La Conquista, la Colonización, la Independencia y la Reforma han llevado al mexicano a la desconfianza y al recelo, lo que ha fomentado, y sigue fomentando, su misterio. No obstante, Paz sostiene que una explicación histórica no basta e incita a mirar al presente. Subraya que el mexicano tiene voluntad de ser y nota que esta determinación se refleja en los actos violentos, en las fiestas, en el culto a la muerte y en el uso del lenguaje de las malas palabras. Paz destaca que, en tales contextos, el mexicano sigue revelándose y ocultándose en un continuo abrirse y cerrarse frente a todo y a todos. Asimismo, señala que esta ambivalencia se manifiesta también en la religión católica y en la mitología azteca, a las que sus compatriotas acuden y en las que vierten y reflejan su propio destino.
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